El equipo empezó el partido igual que el fin de semana anterior: sin intensidad y cometiendo los mismos errores.
Los cambios que introdujo el cuerpo técnico tampoco hicieron que el equipo mejorara, mientras que el Olivo se adelantó en el marcador. Ese gol tampoco desmelenó a las chicas, pero al menos La Meca logró empatar.
Tras el descanso, el equipo cambió radicalmente (para bien) y el dominio fue total, pasando al Olivo por encima hasta tal punto que el resultado se quedó corto.
En el descanso introducimos varios cambios y hablamos de lo que necesitaba el equipo y en la segunda mitad el cambio fue radical, el dominio fue total hasta el punto que el resultado se queda muy corto.
“Me voy muy contento con la reacción que tuvieron las chicas en el segundo tiempo”, explicó Joaquín Moreno-Ventas al final del partido.