Partido con condiciones meteorológicas no muy buenas, con mucho viento, aunque la lluvia nos respetó durante los ochenta minutos.
Un encuentro más, nos volvimos a encontrar un rival totalmente replegado con una línea de cinco defensas (e incluso a veces de seis), con cuatro jugadores por dentro, dedicándose completamente a defender y a lanzar balones en largo al jugador que estaba arriba. Por tanto, se presentó un partido complicado, en el cual los chicos no paraban de intentarlo, pero era muy difícil romper esas dos líneas tan juntas que tenían y que apenas se movieron durante todo el partido.
El primer gol vino en el minuto dos gracias a una acción de balón parado que Asier materializa para poner el 0-1. En el minuto 22, nos marcaron un gol en un pase erróneo de nuestro portero al intentar sacar el balón jugado; un tanto que nos dejó con cara de tontos porque no habían llegado a puerta. Sin embargo, fue Eduardo en el minuto 26 quien, tras una falta indirecta en el área, mete el 1-2.
Hasta el minuto 60 no fuimos capaces de volver a marcar (Eduardo), pero a partir de aquí el camino se allanó y Asier, Alejandro y, de nuevo, Eduardo y Asier, remataron el partido.
“Me gustaría destacar el trabajo del equipo y la actitud de no rendirse pese a la dificultad que entraña enfrentarse a rivales que se cierran tanto en un ambiente inhóspito”, explicó Patricia Mascaró al final del partido.