El Infantil Masculino B se alzó con la victoria en su visita al campo del colista en un día marcado por las numerosas bajas del equipo, lesiones y enfermedades.
La Meca era consciente de que no debía confiarse en este partido ya que el resultado de la ida fue también favorable pero la diferencia no fue amplia y, además, el equipo iba a estar mermado por numerosas bajas, por lo que algunos jugadores debían ocupar posiciones menos habituales. El partido fue controlado por La Meca, que encerró a los locales en su propio campo con un buen sistema de presión que impedía la fluidez en el juego. Las ocasiones comenzaron a llegar, pero el Infantil Masculino B mostró nuevamente dificultades para concretar las mismas. A partir del minuto veinte la cosa cambió: Pablo abrió el marcador y La Meca puso la directa para llegar al descanso con un 0 a 3.
La segunda parte tuvo el mismo guión que la primera. La Meca no sufría en defensa, por lo que las líneas cada vez se fueron adelantando más hasta, de nuevo, embotellar al Atlético Velilla en su propio campo. No hubo acierto con las ocasiones generadas y no sería hasta el último minuto de partido cuando Pablo anotase el cuarto y definitivo tanto. Tras el gol, una acción muy fea por parte de un jugador del equipo local, con una entrada antideportiva, ocasionó la expulsión directa del infractor y, lo peor para el equipo, la lesión de gravedad de Darío, que tuvo que asistir al médico al finalizar el encuentro.
“En cuanto a lo deportivo, me voy contento con el trabajo de los chicos ya que hemos mejorado el resultado del partido de la ida y, esta vez, jugábamos como visitantes y con numerosas bajas y, aunque es cierto que nos cuesta concretar las ocasiones generadas, seguimos trabajando para mejorar este aspecto”, explicó Sergio Villaseca al final del partido. “Por otra parte, y no es la primera vez que nos pasa ya, me voy disgustado por los valores del fútbol que se ven a veces, la entrada a hacer daño a propósito a mi jugador nos ha costado una larga lesión de un defensa clave de nuestro equipo y su expulsión directa, aunque merecida, no nos supone ningún consuelo; creo que hay que saber ganar y perder y esos valores se están perdiendo”, concluyó.