Tras acabar la primera ronda de la competición en la mitad de la tabla clasificatoria, nos enfrentamos al cuarto clasificado: un equipo bien ordenado y con una clara idea de juego.
Nuestras chicas saltaron al campo tratando cerrar líneas de pase al rival y buscando el orden en todo momento. En líneas generales, fue un partido muy táctico, en el que intentamos anular la estrategia rival, que iba variando con el avance de los minutos, ya que las rivales siempre andaban en la búsqueda de nuevas soluciones. Así llegó el descanso.
En la segunda mitad, las fuerzas comenzaron a fallar y eso en el fútbol es sinónimo de errores. Un contraataque bien ejecutado por Sonia nos adelantó en el marcador, mientras que las rivales reaccionaron rápido y en apenas diez minutos dieron la vuelta al resultado. Nuestras chicas tuvieron la mala suerte de tropezar en dos acciones consecutivas con los palos de la portería rival y así acabó el encuentro.
“Hemos jugado tres partidos consecutivos contra rivales que están peleando por el ascenso y el desgaste ha sido importante, pero las sensaciones son fantásticas porque el grupo ha madurado muchísimo en estas últimas jornadas”, explicó Alejandra Pardo Barreda al final del encuentro. “Si las lesiones y enfermedades respetan al grupo y las chicas siguen trabajando igual de bien, estoy convencida de que daremos la sorpresa en la vuelta”, añadió la entrenadora ripense.