La Meca se enfrentó a uno de los rivales de la parte alta de la clasificación.
Los jugadores ripenses lucharon como leones desbaratando una tras otra todas las ocasiones que creaba los alcalaínos, destacando sobre todo la línea defensiva y el portero, logrando un claro 0-0 en el marcador.
El partido continuó por los mismos derroteros, pero un gol inesperado de Mario a los once minutos de partido llenó de ilusión a la parroquia ripense. Sin embargo, cuando apenas quedaban trece minutos para acabar el partido, los alcalaínos dieron con la tecla y remontaron el partido.
“Yo me quedo con el gran trabajo que realizaron los chicos, antes que con el resultado, que nos ha dejado con un mal sabor de barco”, explicó José Romero al final del partido.