La Meca de Rivas llegó al encuentro con la inquietud de no saber muy bien qué tipo de rival se iba a encontrar enfrente tras analizar los diferentes resultados del equipo rival.
El encuentro arrancó con dos equipos muy igualados, pero ninguno lograba tener el control del juego. Esto provocó una primera parte loca en la que en tan solo diez minutos se marcaron cuatro goles, dos por parte de cada equipo. Pero a dos minutos de finalizar el primer tiempo, las ripenses se ponían por delante en el marcador (3-2), y así se llegó al descanso.
Sin embargo la concentración jugó un papel muy importante en el desarrollo de la segunda parte. De esta forma, a pesar de seguir aumentando la distancia en el marcador con un nuevo gol, el equipo visitante logró empatar el partido (4-4). Finalmente, con el equipo volcado en campo rival buscando la victoria, el Santa Eugenia marcó el gol de la inesperada victoria después de un buen contraataque.
“Hemos tenido buenas fases de juego durante el partido, pero tenemos que ser conscientes de la importancia que tiene no perder la concentración y el ritmo del partido”, indicó Javier Rodríguez al final del encuentro. “Las chicas vienen trabajando muy bien y sabemos que pronto llegarán los resultados”, añadió.