Partido muy competido frente a un rival que puso las cosas muy difíciles.
Los argandeños empezaron el encuentro con mucha fuerza y empuje, presionando arriba y adelantándose en el marcador. Sin embargo, una genialidad de Mario y Alonso en el minuto 20, sacando una falta rápida y con precisión fue finalizada por éste último para empatar el partido. Tras el gol, La Meca se asentó en el campo y comenzó a generar muchas ocasiones con entradas por banda de Mario y de Garrido.
No sería hasta el segundo tiempo cuando Alonso remontó el encuentro para los intereses ripenses. Ese gol, junto a un inesperado bajón físico del rival, provocó una mayor sincronización en el juego combinativo de La Meca. En consecuencia, Dani marcó dos goles más.
“La victoria siempre es positiva, aunque creo que el árbitro se complicó bastante la vida sacando numerosas tarjetas innecesarias”, indicó José Romero al final del encuentro.