Penúltimo partido de liga, contra el último clasificado de la tabla. Afrontábamos este partido con la necesidad de ganar, puesto que una derrota nos hubiese condenado al último lugar.
Empezamos en el partido algo distraídas, lo que desencadenó en que el Julián Marías monopolizara el dominio del juego. Tras un cambio de sistema en el minuto cinco, empezamos a tejer jugadas combinadas y a asediar su portería. El partido empezó a variar su rumbo, debido a que las ocasiones que generábamos eran suficientes como para ponernos por delante, faltando tan solo el gol. En una jugada en el área rival, una serie de rebotes favorecieron a nuestra delantera, Patricia, que ajustó un disparo al palo marcando el primer gol. Así nos fuimos al descanso.
Éramos conscientes de que nos jugábamos todo en el segundo acto, ya que no era el primer partido en el que nos remontaban tras realizar una gran primera parte. Al ser conscientes de este hecho, las jugadoras saltaron al campo muy concentradas y con entusiasmo para tratar de ganar el partido, no concediendo ni una oportunidad de gol para el rival. En una de esas jugadas, un balón lanzado a la espalda de la defensa fue controlado por Belén, que encaró sin dudarlo la portería rival y colocó el balón pegado al poste para marcar el gol de la tranquilidad. El resto del partido fue un mero trámite.
“Una victoria más para nuestras chicas, que jugaron un gran fútbol combinativo y fueron superiores al rival de principio a fin, excepto en los primeros cinco minutos”, indicó Víctor Haro al final del encuentro. “Solo queda un partido de liga y tenemos ganas de acabar con un buen sabor de boca”, puntualizó el preparador ripense.