El equipo no salió concentrado desde el primer minuto y lo pagó caro.
Sin hacer mucho ruido, el rival logró marcar cuatro goles en apenas veinte minutos. Parece que en los últimos diez minutos del primer tiempo el equipo reaccionó, logrando marcar dos goles de bella factura en la que varios jugadores estuvieron involucrados realizando buenas acciones combinadas. En la segunda mitad, sin embargo, no estuvimos a la altura, puesto que no nos empleamos a fondo en tareas defensivas al no despejar los balones contundentemente: el contrario se limitó a mandar balones dentro del área, asegurándose peligro y goles.
“Todavía somos un poco blandos y poco expeditivos, aunque continuamos desarrollándonos progresivamente, asimilando conceptos y trabajando duro”, explicó David de la Fuente al final del encuentro.