Patricia para esta ocasión confiaría de inicio en el siguiente equipo: Rodrí; Héctor, Marco, Karim, Manuel; Pablo, Pacho, Eduardo, M. Galicia; Calderón y Ángel.
El partido contrariamente a lo que podría preverse, resultó ser ya desde el comienzo muy disputado, con el adversario bien posicionado y haciendo valer su fortaleza física en muchos de sus jugadores para hacer complicada la circulación del balón de nuestros chicos que incurrían frecuentemente en errores de precisión en los controles y pases, haciendo que el fútbol fuera muy espeso.
Aunque el equipo que intentaba construir era la Meca, las ocasiones sobre la portería rival brillaban por su ausencia. Sería, por el contrario, el visitante, quién a punto estaría de adelantarse en el marcador en una descoordinación de la zaga al ceder hacía atrás un balón a Rodri y éste, en su despeje, le dejó el balón a un rival que, por fortuna, no acertó a tirar entre los tres palos de nuestra portería.
Con el paso de los minutos, nuestro equipo se partía en la línea medular, donde en muchas ocasiones se veía clara inferioridad numérica, con muchos jugadores azules por delante del balón.
Antes del descanso tendríamos dos clarísimas oportunidades producto de jugadas de estrategia en la salida de un córner y una falta, pero que, lamentablemente y con todo a favor, no se concretaron en gol. Antes, Pablo disfrutaría en un lanzamiento de golpe franco que pondría en problemas al menudo portero del Carabaña, que daba cierta sensación de inseguridad, pero al que no se le probó con lanzamientos lejanos a lo largo de todo el partido.
En la reanudación, la tónica fue muy similar al de la primera parte. Patricia daría entrada al terreno de juego a M Rodriguez y Edu por Angel y Calderón al inicio de la segunda parte, para intentar darle un cambio al juego, pero lo cierto es que el rival aun a pesar de no disponer de cambios para oxigenarse, parecían, con el paso de los minutos, fortalecerse en su convicción de sacar frutos de su visita a Rivas. Hugo y Alex saldrían en el minuto 46 por Eduardo y Marco, pero aunque la posesión del balón era claramente azulona, no lográbamos filtrar pases entre líneas a las espaldas de la zaga adversaria a nuestros rápidos puntas, donde se mostraban como muros infranqueables.
Manu entraría por Manuel en el minuto 57, disparando así nuestra entrenadora la última bala. El equipo lo intentó hasta la extenuación, pero no pudo ser. Mucha precipitación y escasas ideas. No era nuestro dia. Lástima no haber podido aprovechar la derrota del que entonces iba líder, la Escuela de Arganda frente al Rivas FC y el empate de La Fundación del Rayo, que nos hubieran permitido auparnos al segundo puesto, pero queda mucha liga y se aprieta mucho la clasificación con cuatro equipos en tres puntos.
A la vuelta de vacaciones nos espera un “hueso” muy duro de roer, las chicas de la Fundación del Rayo… pero ya habrá tiempo para preocuparse. ¡Feliz Navidad!